Por Osvaldo Macedo
Referente de la Juventud de la CCC
y del movimiento “Ni un pibe menos por la droga”

“Lxs jovenes no somos peligrosxs, estamos en peligro”

Desde distintos barrios de la ciudad lxs jóvenes de la juventud de la CCC, de la Juventud Comunista Revolucionaria y del movimiento #NiunpibeMenosPorLaDroga, en conjunto con distintas juventudes de organizaciones sociales, partidos políticos, ONG y agrupaciones estudiantiles, participamos de la cuarta marcha de la gorra que se realizó en Mar del Plata el viernes 23 de noviembre.

En sintonía con lo que pasaba en muchas ciudades del país, los jóvenes marplatenses salimos a la calle para que el mal gobierno escuche nuestros reclamos. Salimos a la calle para decirle a la sociedad que “¡los jóvenes no somos peligrosos, estamos en peligro!”

Fue una gran jornada de lucha. Se expresó el descontento con la política de ajuste de este gobierno. Ajuste que impacta negativamente en la educación, el deporte, la salud y la cultura. Todas áreas imprescindibles a la hora de pensar una infancia, una niñez y una adolescencia plenas y llenas de oportunidades.

En este contexto, signado por la crisis y la falta de trabajo, crece el flagelo de la droga y las adicciones. Es por eso que exigimos la inmediata aprobación de la Ley en Emergencia en Adicciones. Iniciativa que venimos impulsando y promoviendo, los movimientos populares, hace más de un año.

La política del gobierno es reforzar el ajuste, aumentar la represión y la criminalización de las protesta social. En este contexto, se estigmatiza a los pibes y pibas de los barrios. El abuso de las fuerzas de “seguridad” es cada vez mayor y cobra más víctimas. Los casos de gatillo fácil se multiplican. En las últimas semanas tuvimos dos compañeros de la CTEP asesinados por las fuerzas de seguridad provinciales: Rodolfo Orellana de La Matanza y Marcos Soria de Córdoba.

A la par del ajuste crece la bronca y la indignación entre los jóvenes. Estado de ánimo que se canaliza y manifiesta en más organización y ganas de luchar.

Lxs jóvenes les decimos: ¡NO PASARAN!