Siempre hemos planteado que esa deuda es una estafa, cuyo objetivo real no sólo fue fugar capitales, garantizando superganancias a la timba financiera y a los monopolios, sino atarnos y condicionarnos políticamente. Desde ya que ni un solo dólar de ese préstamo recibido se utilizó para promover la industria nacional, hacer calles ni construir rutas, hospitales o escuelas. Los responsables de esta estafa son el gobierno de Macri y el FMI. Esté acuerdo está planteado, en los hechos, un cogobierno con el FMI hasta el 2034.
Hay que tomar la experiencia de los 22 acuerdos anteriores con el Fondo, ninguno de ellos resolvió nada, agravaron la situación y ninguno se cumplió.
Tampoco acordamos con la estrategia de negociación que se llevó adelante. Se dejó pasar el momento de fortaleza luego del triunfo del Frente de Todos en 2019, en que se podría haber investigado la estafa, y se eligió el camino del pago y la negociación larga. Se deslizó la idea de que “el FMI había cambiado” y que estábamos frente a un “Fondo más bueno”. Así, el FMI fue corriendo el arco y esperó su momento, mientras la Argentina le fue pagando cerca de U$D 7.000 millones de dólares. Luego, con las reservas vacías, arrinconados por un Fondo Monetario endurecido y una oposición reaccionaria que juega al desgaste, a la crisis y voltear al gobierno, quedamos a merced del FMI y sus socios.
No hay acuerdos buenos con el FMI. El acuerdo con el Fondo condiciona a la Argentina y lo pagará con sufrimiento nuestro pueblo. Lo firmado restringe además las posibilidades de lograr la recuperación económica, ni hablar de la posibilidad de poder dar respuesta a las enormes necesidades populares. Contiene un ajuste fiscal a partir de este año, revisiones trimestrales por parte de ese organismo y desembolsos en dólares en función de esas evaluaciones. El monitoreo constante de nuestras cuentas por parte del FMI es una cesión de soberanía humillante e inaceptable.
Todas estas cosas las hemos dicho públicamente y también al interior del Frente de TODOS. Por eso hoy, reafirmamos que la deuda es con pueblo y la nación Argentina. Sostenemos la necesidad imperiosa de investigar la deuda contraída con el FMI y la fenomenal fuga de capitales que se produjo. El Congreso Nacional formó una comisión Bicameral para investigar estos hechos, pero jamás avanzó. Es urgente hacerlo porque el pueblo tiene que conocer a dónde está la plata de la deuda que tomó el macrismo con el FMI.
Fuimos parte de los que luchamos en las calles y en las urnas para derrotar al macrismo. Seguiremos en las calles, sin equivocar el blanco, contra los verdaderos enemigos de los intereses de nuestra patria y del pueblo argentino. Seguiremos exigiendo un cambio de rumbo que permita resolver las urgencias populares.
LA DEUDA ES CON EL PUEBLO