Una experiencia barrial ante emergencias

 

Por Héctor Maciel, dirigente de la CCC Mar del Plata

Corría el año 1993, abril, martes 13 para ser mas exacto. Era de madrugada y una tormenta de viento y lluvia azotaba la ciudad. El viento fue creciendo en intensidad y de golpe un ventarrón que metía miedo. Era un tornado. Ingreso por el noroeste a la ciudad y uno de los barrios que impacto fue Libertad. Luego siguió hacia el centro reduciendo su intensidad. El daño fue muy grande: techos volados, paredes caídas, árboles arrancados de cuajo, inundación…una catástrofe en unos minutos.

Nosotros dirigíamos desde hacia un año la Sociedad de Fomento del barrio y desde allí comenzamos a organizar la asistencia. Un grupo de vecinos nos pusimos al hombro la solidaridad. Fue tan impactante la emergencia que llamaron al ejercito para ayudar en la logística de camiones y sobretodo a resolver la comida. Trajeron una cocina de campaña y un sargento a cargo de ella. Achineli era su apellido.

Al año siguiente una gran inundación golpeo al barrio…evacuados, reparto de colchones, alimentos, etc…todos estos fenómenos naturales nos golpearon pero a su vez nos dieron grandes enseñanzas: Nos fuimos organizando y uniendo en el barrio.

Se conformo RED COMUNITARIA esto es la coordinación entre las organizaciones populares y las instituciones con asiento en el territorio: escuelas, sala de atención primaria, servicio de asistencia social, iglesias, la sociedad de fomento eramos un poco el eje de esto. Nuestra sede funcionaba como local principal de esta Red. Y para incentivar y promover la participación de los vecinos empujamos la elección de delegados por manzana( como es un barrio muy extenso la ampliamos a un delegado cada cuatro manzanas) el delegado debía ser elegido por sus vecinos en una reunión convocada al efecto. Su papelera transmitir a la Red las necesidades y problemáticas de su sector. Y a su vez llevar información de lo que se resolvía en la Red. Era un ida y vuelta. Este fue un mecanismo importante para evitar el punterismo y el clientelismo de parte de las autoridades municipales y de otras fuerzas políticas.

Para la próxima inundación ya estábamos preparados. Se llevaba control de adonde iban los recursos y se impedía que se entreguen a la bartola o en forma anárquica. Las asistentes sociales eran muy comprometidas y eran lacara visible del estado municipal . Tengamos en cuenta que en esa época no había celulares (nos manejábamos con unos handys) y tampoco habían nacido las organizaciones sociales.

Resumiendo, fue una gran experiencia comunitaria, con participación popular,con métodos democráticos y horizontales y con una dirección política firme y decidida a servir al pueblo. En las nuevas condiciones de aislamiento y cuarentena podemos apoyarnos en esta rica experiencia para movernos.