En estos 4 meses de ASPO, se han registrado 71 femicidios y 6 vinculados.

2º informe Observatorio de Femicidios,  Multisectorial de la Mujer.

Desde el Observatorio de Femicidios de la Multisectorial de la Mujer de Mar del Plata (OFeMMM) presentaron su 2º informe cuatrimestral que va desde el mes de mayo hasta agosto 2020. Donde señalan que en estos 4 meses dentro del aislamiento social y preventivo, se han registrado 71 femicidios y 6 vinculados.

Se destacan en este informe, tres aspectos como centrales a la hora de analizar la problemática de los femicidios.

  • Disponibilidad de cuerpos jóvenes y adolescentes.
  • Consecuencias del aislamiento en el incremento de casos
  • Causas del aumento de la ferocidad en los ataques

“Disponibilidad de cuerpos jovenes y adolescentes

 La violencia de género es una problemática de grandes dimensiones en la Argentina y la constatación de la incidencia del fenómeno entre jóvenes adolescentes es preocupante ya que a partir de allí se consolidan los vínculos de pareja marcados por la violencia. Nos estremece y conmueve la muerte joven, la muerte adolescente, la disponibilidad de sus cuerpos ante la ferocidad del patriarcado. Esto representa a nivel simbólico el ejercicio del poder masculino para hacer lo que le plazca con los cuerpos femeninos y disidencias.

Un dato que queremos destacar es que el 20% de los femicidios fueron cometidos sobre mujeres menores de 20 años.

Un disparador del pedido de la Emergencia en Violencia de Género a nivel nacional fueron los femicidios de Rocio Vera de 14 años de Reconquista, Santa Fe quien fue abusada y asesinada a golpes en manada, Según explicó el fiscal Aldo Gerosa, la víctima habría sido violada por los cinco mayores de edad y también por dos menores. Rocio estaba embarazada de dos meses y se puede afirmar que el ataque se debe a su negativa a mantener relaciones sexuales con uno o varios presentes en el lugar, lo que llevó a su femicidio.

Otro hecho similar por lo aberrante, fue el de Tatiana Guzman de 15 años ocurrido en San Rafael, Mendoza quien fue atacada por su agresor en su domicilio con intención de abusar sexualmente de la menor. Al resistirse Tatiana el femicida le generó varias heridas con un arma blanca que luego de diez días de internación en terapia intensiva, por la gravedad de las heridas, terminaron en su muerte.

Como señalan Nadia Ferrari y Paula Rey (2016) en su informe “Adolescentes mediatizadas” la contradicción entre la hipersexualización de niñas y adolescentes en el discurso y las imágenes habituales de los medios, el modelo de mujer que se les impone y el tratamiento posterior que reciben al ser víctimas de agresiones en las que suelen surgir diversos estereotipos. Con frecuencia el modo en que iban vestidas, por ejemplo, se puede transformar en un justificativo de lo que les ocurrió.

Resulta preocupante el discurso culpabilizador hacia las adolescentes víctimas de violencia y la resistencia a contextualizar estos casos, en primer lugar, como hechos de violencia contra las mujeres y, en segundo lugar, como un problema social y no un hecho policial aislado.

En este cuatrimestre como dijimos el 20% de los femicidios se produjo en la franja etaria hasta los 20 años, luego sigue 21-40 con el 46, 5%, a continuación 41-60 con el 24% y más de 60 años con el 5% de los casos

Consecuencias del aislamiento por la cuarentena y el incremento de casos

 Desde que comenzó la cuarentena por el Covid-19 se produjeron 111 femicidios, decimos que hubo un aumento en los casos pues en el mismo periodo del año 2019 hubo 80 femicidios.

Esto se debe al poder y control que el victimario ejerce sobre su víctima, durante el encierro por el ASPO, que agrava aún más esta situación, aumenta el grado de brutalidad y ferocidad, se acelera el círculo de la violencia machista y lamentablemente en muchos casos con el resultado final del femicidio.

Creemos que hay una naturalización pues los hechos de violencia contra las mujeres reciben cobertura como: violencia sexual; violencia física; violencia emocional y/o psicológica; prácticas tradicionales nocivas y violentas; violencia socio-económica y por ultimo femicidio. Pero no solo hay que pensarlo en clave de femicidios ya que la violencia comienza de forma psicológica para luego ir en una espiral ascendente hasta llegar a la violencia extrema, que es el femicidio. Desde el OFeMMM consideramos que es fundamental pensar en esta naturalización en términos culturales, sociales y políticos. La cuarentena por la pandemia por el Covid-19, puso al descubierto lo que ya existía y se agravó aún más en este contexto económico y sanitario. La mujer al verse obligada a aislarse junto a su agresor aumenta su desprotección. La posibilidad de denuncia de las víctimas se complejiza en el actual contexto de aislamiento como así también las intervenciones de lxs profesionales que en la mayoría de los casos no atienden en forma presencial cosa que no solo dificulta una evaluación integral sino que no tiene la privacidad pues un muchos casos al hacer la denuncia la mujer está con su agresor.

En los femicidios que se produjeron en este cuatrimestre el 76,3% se produjo por ex parejas, concubinos, cónyuges y novios. El 7 % del vínculo es filial, el 4% no tiene relación con la víctima y el 5% sin datos. Podemos ver que en más del 80% de los casos los femicidios se producen dentro del ámbito íntimo y familiar.

Causas del aumento de la ferocidad en los ataques

 Como venimos señalando en nuestros informes, es necesario tener en cuenta que está cambiando el perfil de la violencia de género y dentro de ella las características de tiempo y forma de los femicidios.

Los primeros estudios sobre violencia de género, Fernandez (2012) señalaban que la muerte de la mujer a manos de su pareja, solía ser el desenlace fatal de muchos años de violencias. Si bien esta modalidad continúa, hoy estamos en presencia de mujeres asesinadas por novios, amantes o parejas en vínculos que pueden ser de pocos años o meses.

Además de este cambio vemos con mucha preocupación que se está produciendo cambios en la ferocidad hacia el cuerpo de las mujeres.

En el relevamiento de datos del año pasado la mayor causa de muerte en los femicidios era el disparo, en cambio en este año la causa de muerte con mayor porcentaje es el contacto directo con la víctima pues entre los golpes, estrangulamiento y puñalada suma más del 64% de los casos. El disparo el 14%, quemadas 16%, abuso sexual 3% y otras causas de muerte 3%.

En el contexto de aislamiento por la cuarentena no podemos dejar de señalar que el hogar cuando se convive con el agresor termina siendo el lugar más inseguro para la mujer.

Por todo lo anteriormente expuesto seguiremos exigiendo la Emergencia Nacional en Violencia hacia las Mujeres y Disidencias, ya que una emergencia declarada como tal podría realmente resolver este flagelo asignando un presupuesto extraordinario ya que es el Estado el único agente que posee las herramientas necesarias para paliar esta realidad.

Cada muerte de una mujer es una muerte de una parte de nosotras que al principio nos deja sin palabras pero después nos llena de fuerza para seguir luchando.

 

¡¡NI UNA MENOS!!

!!VIVAS NOS QUEREMOS!!

EMERGENCIA NACIONAL EN VIOLENCIA HACIA LAS MUJERES YA