“Esta tragedia no puede quedar impune”

 

Desde este comunicado acompañamos en el dolor a los familiares, compañeros y amigos de los marineros del buque de pesca “Repunte”. Cada buque que se hunde, arrastra con ellos historias de vida que se las lleva el mar, familias que quedan desmembradas y fuentes de trabajo que no se recuperan. La antigüedad promedio de las embarcaciones que pescan en nuestras aguas supera ampliamente la de la mayoría de los países de la región. 40 años es la antigüedad promedio de la flota con asiento en el puerto de Mar del Plata. Tenemos 91 embarcaciones que superan los 45 años. En estas más de 720 marineros arriesgan sus vidas. Argentina es uno de los pocos países en el mundo que teniendo industria naval permite la importación de barcos usados. Surge del informe elaborado por Tecnopesca que de los 485 barcos pesqueros ingresados a la matrícula, el 51,55% fue adquirido en el extranjero. Si se calcula la capacidad de bodega, ese porcentaje se eleva al 85,46%. Es que la industria nacional se debió limitar a la construcción de barcos con una capacidad de bodega menor a 300 toneladas Año tras año tenemos que lamentar hundimientos. ¿Hasta cuándo? No podemos caer en “accidentes” o “fatalidades”. Acá hay responsables de que en esta fiebre por el langostino se salga a pescar en cualquier condición. Aunque es un tema que debe investigar la justicia, trasciende de varias fuentes, que el buque “Repunte” no estaba en condiciones para salir. Las necesidades económicas de los trabajadores, hace que acepten trabajar en cualquier condición. Pero ¿No hay estado que debe regular esto? La empresa tuvo años parado este barco, como el resto de su flota (Don Luciano, Cabo tres puntas, Wiron IV, entre otros). Dejando familias sin trabajo sin que nadie les diga nada. Hoy la empresa pelea por no perder las licencias de pesca. La terrible gestión de Tomás Gerpe, como Subsecretario de Pesca de la Nación, debe asumir la responsabilidad ante esta tragedia.La empresa Ostramar. S.A. de la familia Caputo debe hacerse cargo, de que esa “chatarra que flotaba” (como tantas en el muelle) haya salido en esas condiciones. También deben hacerlo aquellos que hicieron la vista gorda sobre los controles.Llamamos todos los sectores sindicales, políticos y sociales a unir fuerzas para que haya justicia y se ponga punto final a esta situación. Es imposible renovar la flota pesquera sin el Estado impulsando regulaciones y destinando los fondos necesarios.

Matias Maciel

Referente Partido del Trabajo y del Pueblo

Mar del plata