Crisis en la Campagnola

La Campagnola de Mar del Plata solicitó al Ministerio de Trabajo Bonaerense la reducción del pago de haberes -a través de suspensiones y reducciones horarias- a más de 200 empleados de la planta, ubicada en Edison y Ayolas. La empresa se comprometería al pago de un “garantizado” por dos meses, hasta el inicio de la zafra del pescado, que sería a mediados de junio. La planta viene de un parate desde fin de año pasado. Según informaron los medios la empresa solicitó la aplicación del artículo 223, que prevé esta reducción del pago de haberes y en el caso de haber un acuerdo entre las partes, comenzaría a aplicarse dentro de 5 a 7 días.La empresa, propiedad del grupo ARCOR, ya anunció el cierre de dos plantas en Mendoza reubicando la producción en San Luis con más de 100 despidos. Y hubo adelantamiento de vacaciones en otras. Las razones que aducen son los altos costos de producción, las importaciones y por sobretodo la caída generalizada del consumo. La política económica de macri con la suba del dolar y la caída de los salarios, el aumento de la desocupación, la inflación provocó una fuerte caída del consumo interno. A esto se le suman las impagables tarifas de gas y luz, la falta de control de la importaciones, asestando un duro golpe a la pequeña y mediana industria, con cierre de fábricas y despidos en todo el país.

Arcor no es el caso. Se trata de una multinacional, que se benefició de la exportación y el dólar alto, los salarios bajos, destruyendo a la competencia y comprando bajo a los productores su materia prima. Ante una crisis que recorte sus ganancias, la receta es la misma, ajuste a los obreros, reubicación de sus fábricas, suspensiones y despidos.

Por eso hay que defender a los obreros y su continuidad laboral, suspendiendo los despidos, sin recorte de sueldos, respetando las leyes laborales y convenios colectivos. El SOIP debe encabezar el reclamo ante esta medida que agravaría aún más la situación de los obreros del puerto marplatense.